A nomeação de Fr. Diogo de Murça não é apenas documentada pela provisão de 5 de Novembro de 1543, pois com esta mesma data existem mais dois documentos: um alvará determinando o ordenado de Fr. Diogo, como reitor, que seria como o dos seus antecessores, de 60 mil réis anuais, e uma carta de D. João III à Câmara de Coimbra, participando a exoneração de Fr. Bernardo da Cruz «por eu êcareguar o bpo de sam thome ê cousas de seruiço de ds & meu & nam poder jr seruir de Reitor desa vniuersidade de que o tinha êcareguado», e sua substituição por Fr. Diogo de Murça (vid. M. Brandão, Documentos de D. João III, vol. II, pp. 142-144).

[ XXIII ]                                                                                                                                              (§ 115)

O Dr. António José Teixeira, no seu catálogo dos Visitadores e reformadores da Universidade ou dos Estatutos desde 1537 até 1772 (em O Instituto, vol. XXXVII, p. 549), omitindo o nome de D. Fr. Bernardo da Cruz, corrobora a afirmação de Leitão Ferreira.

[ XXIV ]                                                                                                                                                 (§ 16)

São as seguintes as referências que Fr. José de Sigüenza faz a Fr. Diogo de Murça na Historia de la Orden de San Jerónimo

1.a) «... Como mudò el Rey don Juan el proposito, y passò la Vniuersidad a Coimbra, acordò tambien de mudar el Colegio de religiosos de san Geronimo que auia començado a plantar en Santa Marina de Acosta, en tanto que les edificava el Colegio propio.

«Estimaua en tanto a los religiosos que les aposente) en sus mismos palacios de Coimbra (fauor particular), dandoles cierta parte de sus aposentos, donde pudiessen viuir religiosamente.

«El colegio se edifice) junto al Castillo de ia ciudad, el mejor sitio della: tiene lindas vistas de donde se descubren aquellos campos tan hermosos, con la ribera de Mondego; sano, apazible, y el edificio excelente, y ai fin vno de los mejores Colegios de toda aquella Vniuersidad. Puede sustentar veynte religiosos con ias rentas que tiene. Procurosela el Rey, de vn monasterio de san Benito que se estinguio, y repartierinse sus rentas entre este Colegio y otro de ia misma ciudad.

«Han salido deste Colegio grandes abilidades, porque las ay estremadas entre ellos, y estudian con cuydado, y ai fin han sido los que han tenido florida ia religion de S. Geronimo em aquel Reyno. Tiene el Rector del Colegio facultad para graduar en Artes y Teologia, por bula Apostolica, y priuilegios Reales; hecho todo por el buen Rey don Iuan el tercero, pretendiendo que dentro de su mismo Colegio se graduassen los religiosos, y con ellos don Duarte su hijo, y su sobrino don Antonio. Quando los mude) de santa Marina, fueron acompaííados de su Ayo, que se Ilamaua fray Diego de Murcia, religioso de san Geronimo, el primer rector de aquella Vniuersidad, y tuuo el oficio hasta que muno. De suerte que podemos dezir, que aquella tan celebre Academia, donde han florecido tantos buenos ingenios, se nacio en ias manos de religiosos de S. Geronimo. Muno don Duarte, siendo ja Arçobispo de Braga, lastimando a toda Portogal, y mas a ia Orden de san Geronimo, con su temprana muerte, lleno de mil virtudes y abilidades en el alma y cuerpo.» (ob. cit., ed. de Juan Catalina García, t. II, Madrid, 1909, pp.124-125. Faz parte da Nueva Biblioteca de Autores Esparioles, dirigida por M. Menéndez y Pelayo).

2.a) «El otro sieruo de Dios hijo de ia misma casa de Pefialonga que se liame) fray Diego de Murcia, merecia tambien vna larga relacion de sus grandes partes y virtudes. Fue por ellas muy estimado dei Rey don Iuan el Tercero, hombre docto en sancta Theologia, y graduado en ella por la Vniuersidad de Lobayna. Hizimos alguna memoria arriba de su religion y letras, y diximos como fue Maestro de don Duarte, hijo dei rey don Iuan el Tercero, Y Rector de ia Vniuersidad de Coimbra, y el que edificò el colegio que en ella tiene nuestra Religion, y le dotè de las rentas que tiene. Es fama publica en su casa e en todas las otras, que fue tan grande su modestia, y el estar firme en ia humildade que profesel, que jamas se pudo acabar con el aceptasse vn Obispado que el mismo Rey le daua aunque le fue muchas vezes ofrecido. Para estar firme en estos encuentros, muy de atras ha de venir la platica de las virtudes. Fue este padre Abad dei monasterio de Resoyos [sic], de ia Orden de san Benito, y como buen Perlado, y ansi en parte fue el primer reformador de ia Orden de san Benito en aquel Reyno, porque en los palacios de ia Vniuersidad en que moraua hizo vn Colegio para ellos y recibio alli nouicios, dandoles por maestro vn frayle de nuestra Orden, para que despues siendo monges bien instituydos y criados en virtud y letras pudiessen aprouechar y proseguir en ia reformacion dei monasterio de Resoyos, y despues poco a poco se fuesse reformando toda ia Orden. Y por que la verdadera reformacion es reduzir ias cosas a sus primeros principios y costumbres santas, mande) con licencia dei Provincial de ia Orden de San Geronimo que dos Religiosos delia viniessen a Castilla y lleuassen ia regia, habito y constituciones de la Orden de san Benito. Y assi crie) el prudente varon grandes Religiosos en aquella Orden, que despues fueron bastantes para ia reformacion de toda ella. Muno el siervo de Dios en el mismo monasterio de Resoyos, y alli esta sepultado». (Id., ibid., p. 348).

[ XXV ]                                                                                                                                                (§ 117)

SOBRE A HISTORIA DOS ESTUDOS NA ORDEM DE SÃO JERONIMO

Não logramos descobrir a Informação de Fr. Jacinto de São Miguel, a que Leitão Ferreira alude neste parágrafo; porém, no ms. 610 da Biblioteca Geral da Universidade de Coimbra, encontram-se umas Memorias           dos estudos, em que se criarão os monges de S. Jeronimo, e suas mudanças desde o tempo da sua fundação em Portugal, athe o feliz reinado do fidelissimo Sr Rey D. José o primeyro que Deos guarde. Escritas em o anno de 1782, e em 17 de janeyro foraõ entregues ao Illustrissimo, e Ex.rn° S7 Bispo de Beja, que as mandou escrever por ordem de S. Mages.de.